Hacia Esquipulas III

(PALABRAS DE BIEVENIDA PARA LA REUNUÓN DE LA COMISIÓN DE INTEGRACIÓN DEL PARLACEN CELEBRADA EN SANTO DOMINGO LOS DÍA 25, 26 Y27 DE JUNIO DE 2007)

El martes 12 del presente mes el periódico Listín Diario publicó unartículo del periodista Andrés Oppenheimer, que tituló "La desunión decentroamericana". En él, el afamado articulista mostró preocupación por el estancamiento en que se encuentra el proceso de integración regional, en el que toma parte la República Dominicana desde su llegada al Parlamento Centroamericano.

Da la impresión de que los actores que desvencijaron el istmo luego de la separación de México, lo mantienen dividido por el trasnochado apego al antiguo concepto de soberanía. No se dan cuenta de que a pesar del pasaporte único y la tímida apertura de las fronteras, argumentos que algunos usan para demostrar que las cosas van bien, que el proceso avanza con agilidad, se deben acometer políticas más agresivas destinadas a definir una unión aduanera que encamine el proceso hacia el mercado común, para eliminar los bancos centrales que, por tener diferentes regulaciones, como dice el citado articulista, crean trabas burocráticas que convierten el comercio en una pesadilla.

El asunto es tan complicado que algunos inversionistas alegan, según reveló el citado periodista, que se les hace más fácil exportar desde Guatemala a China que a Costa Rica. Y esta es una de las razones por las cuales la Unión Europea tiene más avanzado su Acuerdo de Asociación Económica con el Caribe que con Centroamérica; pues se prevé que ya para el primero de enero de 2008 entre en vigencia dicho acuerdo.

Los europeos ponen como condición a los centroamericanos que deben avanzar hacia la unión aduanera y el fortalecimiento del PARLACEN para que los EPAs, que es como se conocen los Acuerdos de Asociación Económica por sus siglas en inglés, alcancen a la región. Atendiendo a esta situación, la Comisión de Integración del Parlamento Centroamericano decidió que, en esta reunión anual ordinaria de evaluación que inauguramos esta noche en Santo Domingo, impulsemos el Esquipulas III; el acuerdo que agilizará y profundizará el proceso de integración, haciéndolo más participativo y democrático, más abierto y transparente; el acuerdo que busca fortalecer los órganos fundamentales del Sistema de Integración Centroamericana, SICA; el Esquipulas que he definido como el posible Tratado de Maastricht de los centroamericanos.

Sin embargo, a pesar de los escollos, a pesar de la lentitud con que avanzamos, nuestro proceso no es una utopía como he escuchado decir a algunos políticos de la región. Este es un proyecto sólido, tanto que compartimos con los europeos el privilegio de contar con uno de los dos parlamentos de integración en los que sus diputados son electos mediante el voto popular.

Pero no sólo exhibimos esta fortaleza que nos pone a la par con el proceso de integración más exitoso, sino que producto de la madurez que alcanza este esfuerzo regional, la República Bolivariana de Venezuela, tras meses solicitando su integración al PARLACEN, fue admitida en calidad de observadora, condición que comparten desde hace años, Puerto Rico, México y la lejana Taiwán.

No me cabe duda que por ello, durante la reciente visita que el mandatario dominicano, Leonel Fernández, giró a Brasil en la que se entrevistó con el presidente carioca, Luiz Inácio Lula Da Silva, este último, según cuentan los diarios, aprovechó la ocasión para sugerirle al visitante que respalde el ingreso de aquella nación sureña al Sistema de Integración Centroamericana, SICA.

Por lo dicho anteriormente, se hace evidente que escoger el instrumento económico de última generación para ponerle horizonte a nuestras débiles economías con la construcción de un marcado de 50 millones de consumidores, que es lo que representamos en la actualidad, es el más idóneo mecanismo para atraer inversión y convertirnos en una región más próspera, en la región por donde inicie el proceso de redención económica de América Latina, en la que se reduzca de forma drástica y significativa la brecha que separa a ricos y pobres.

Estos compromisos nos traen a este evento, y como sé del esfuerzo que hacen para acompañarnos en esta jornada que promete aportar su grano de arena para construir un mejor futuro, no me queda más que agradecerles su presencia y darles en nombre de la Comisión de Integración del Parlamento Centroamericano, la más cordial y calurosa bienvenida.

Muchas gracias y buenas noches.

Manolo Pichardo

Santo Domingo, D.N.

25 de junio de 2007